Liberar la tensión.
La risa es una de las respuestas de nuestro cuerpo para liberar tensión. El llanto es otra de las respuestas. A veces vienen juntas. A veces después de mucho llorar nos reímos y, otras veces, nos reímos tanto que nos salen lágrimas. De cualquier forma, el punto es que nuestro cuerpo detesta la tensión y procura liberarla. Por eso nos gusta la comedia; les comediantes generan el balance perfecto de tensión para luego soltarnos un punchline que nos haga sentir aliviados. Todo esto lo aprendí precisamente de un especial de comedia, “Nanette” de Hannah Gadsby.
Decir que les recomiendo ver este especial de Netflix no es suficiente. Más que una recomendación es una petición, véanlo. Véanlo porque Hannah (me refiero a ella por su nombre y no su apellido para fingir que somos amigas) es una comediante brillante y muy valiente. En lugar de recurrir al lugar común de burlarse de les vulnerables, ella muestra su vulnerabilidad y nos enseña que “no hay nadie más fuerte que una mujer rota que se ha reconstruido a sí misma.”
Hannah comienza contándonos de Tasmania, su tierra natal, y de cómo se sintió creciendo ahí y descubriendo que era “un poco lesbiana.” Después hace algunos chistes sobre las expectativas que la gente tiene de las lesbianas y de las veces que la han confundido con un hombre. Durante ese rato, a la audiencia (y a mí, en mi sala) no se nos quita la sonrisa de la cara. Sonreímos sabiendo que ya viene el punchline, listes para soltar la risa. Pero Hannah cambia el tono y nos dice que dejará la comedia, que está cansada de burlarse de sí misma: “Me menosprecio a cambio de poder hablar y ya no lo haré. No me lo haré a mí y no se lo haré a nadie que se identifique conmigo.”
Entonces, el balance entre la tensión y la risa cambia. La tensión aumenta y aumenta y el final de las historias ya no es el punchline que esperamos. Sigue habiendo chistes pero también reflexiones, momentos para entender que la risa libera la tensión pero no elimina aquello que la causa. Mucho de lo que causa tensión (por llamarlo de alguna forma) en el mundo es el rechazo a quienes son diferentes y Hannah como mujer lesbiana neurodivergente cabe en muchas definiciones de “diferente”. En este especial cuenta su historia hablando de todos estos aspectos de su persona y recalcando que es importante contar estas historias. A pesar de que parezcan apropiadas para una comediante. A pesar de que incomoden. Precisamente porque incomodan y porque esa incomodidad no se alivia con risas, hay que contar nuestras historias.
Con este especial, Hannah ha ganado varios premios al “mejor show de comedia” y se ha convertido en una celebridad internacional. Estos premios no son lo que la vuelve una gran comediante sino su habilidad para hablar de la rabia, la risa, las conexiones humanas, su abuelita y Picasso mientras nos ayuda no sólo a liberar sino a sanar la tensión desde la diversidad.
Imagen: Nanette 2018, IMDB
Qué gusto leerte!
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